(10/7/14) El comentario de IEF sobre la situación de la educación financiera en España según el Informe PISA. 

Los resultados del Informe PISA 2012 sobre competencias financieras no son ninguna sorpresa en un país con poca cultura financiera.

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Ya se han hecho públicos los resultados del último informe PISA sobre el nivel educativo de los adolescentes en el mundo occidental. Esta vez le ha tocado el turno a las competencias financieras, es decir, la resolución de asuntos cotidianos relacionados con el dinero y la economía doméstica, cómo puede ser la lectura de las facturas, el uso del crédito o la comprensión del interés. Y cómo cada año, España ha quedado en una situación mejorable que ha hecho saltar todas las alarmas.

Des del Instituto de Estudios Financieros creemos que hay más de oportunismo que de realismo en estas críticas. Desde hace años los conocimientos financieros (y no tan financieros) de los escolares españoles son mucho menores de lo que sería deseable en un país que quiere competir con sus vecinos europeos. No obstante, esta situación es del todo normal si tenemos en cuenta que el nivel de cultura financiera de los ciudadanos adultos es también excesivamente bajo. La educación empieza en la escuela pero se complementa y termina en casa. Para bien o para mal la cultura del dinero es un valor que se transmite principalmente de forma doméstica.

La falta de dinero no es excusa: los partenariados público-privados o la colaboración con las instituciones financieras – dentro del marco de su actividad de RSC- son alternativas a las limitaciones actuales del presupuesto público.

Des del año 2011 en IEF insistimos las desafortunadas causas de esta situación negativa. Por un lado, escasean los proyectos efectivos de educación financiera. En países cómo Escocia hace una década se empezaron a implantar y ahora ya son la norma. La falta de dinero no es excusa: los partenariados público-privados o la colaboración con las instituciones financieras – dentro del marco de su actividad de RSC- son alternativas a las limitaciones actuales del presupuesto público.

Por el otro, hay un notable desinterés en las finanzas por parte tanto de las administraciones cómo de los propios ciudadanos. Nos guste o no, vivimos en una sociedad poco acostumbrada a la gestión del dinero. A la mayoría de nosotros no nos interesa en demasía nuestras finanzas. Queremos consumir hoy, pero somos perezosos a la hora de planificar para mañana. Reclamamos el derecho a una vida financiera sana y confortable, pero a menudo eludimos las responsabilidades que comporta. El mundo en que vivimos tiende a empujarnos hacia un consumo faltado de análisis y planificación financieros previos. Por ese motivo, es clave e imprescindible dotar al ciudadano de conocimientos para afrontar sus decisiones financieras diarias.

La mejor manera de cambiar estos hábitos es influyendo en los jóvenes. En este aspecto, el IEF coincide con el grueso de las opiniones expresadas recientemente. La solución al problema es más educación financiera, y sobre todo, de mayor calidad. Experiencias internacionales avaladas por la OECD han llegado a la conclusión que divulgar educación financiera en la adolescencia revierte en un consumo adulto más responsable.

Queremos consumir hoy, pero somos perezosos a la hora de planificar para mañana. Reclamamos el derecho a una vida financiera sana y confortable, pero a menudo eludimos las responsabilidades que comporta. El mundo en que vivimos tiende a empujarnos hacia un consumo faltado de análisis y planificación financieros previos.

EFEC (Educación Financiera en las Escuelas de Cataluña) se avanzó a la publicación de los resultados PISA cuando el curso 2012-13 realizó la primera edición de su programa de talleres de educación financiera. Cómo base teórica elaboró una estudio piloto a universitarios sobre conocimientos financieros – inaudito hasta ahora en todo el estado-, dónde quedaba claro que la mayoría de los jóvenes desconocían el funcionamiento de los productos bancarios más básicos, aún y disponer de cuenta corriente y tarjeta de crédito. Su conclusión, la necesidad de educación financiera en un sistema educativo dónde prácticamente no existe, se ha demostrado acertado a la vista de los resultados internacionales que se acaban de publicar.

Desde 2009 el Instituto de Estudios Financieros fomenta la importancia de la Educación Financiera a través de diferentes proyectos dirigidos a distintos estamentos de la sociedad. Estamos convencidos que a largo plazo estas acciones contribuyen a prevenir futuras situaciones de sobreendeudamiento, así como conflictos financieros por desconocimiento similares a los que se han dado durante la crisis económica.
Después del éxito de la segunda edición, EFEC tiene como objetivo para el 2014-15 llegar al 30% de las aulas de Cataluña, aproximadamente unos 25.000 alumnos de 4º de ESO en más de 300 escuelas.
Este mismo año ha empezado Educación Financiera para Jóvenes y Adultos, un proyecto financiado por BBVA a través de acuerdos con las consejerías de educación de Castilla-León, Cantabria y Murcia. Con 235 talleres educando a más de 1000 alumnos, el programa ha tenido una gran acogida y para el año siguiente se prevé la ampliación al resto de comunidades autónomas del estado. 

Dept. de Educación Financiera del Instituto de Estudios Financieros

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